MICROFINANZAS Con éxito se
inició en Lima, el IX Congreso Internacional de Microfinanzas denominado
“Pilares para la inclusión financiera: Acceso, uso y calidad”, certamen que
organiza la Federación Peruana de Cajas Municipales de Ahorro y Crédito en
coordinación con la Caja Sullana. Entre los objetivos
está el de presentar un diagnóstico del estado actual de los servicios
financieros y plantear las diversas estrategias para impulsar un mayor acceso,
uso y calidad; así como compartir también las estrategias y buenas prácticas de
gestión mundial para incrementar el uso de los servicios financieros.
La cumbre que se realiza en el Centro de
Convenciones del Hotel Sheraton, también tiene como fin el analizar las
fortalezas que derivan de una política monetaria que favorezca el desarrollo de
la industria microfinanciera; y reflexionar acerca de cómo mejorar el fondeo de
recursos, el costo y la calidad de los servicios, y la innovación de productos
microfinancieros.
También la de contribuir con la capacitación de los
órganos de gobierno de las instituciones especializadas en microfinanzas para
una mejor toma de decisiones empresariales.
Como se sabe, el desempeño económico del Perú en los
últimos años refleja el esfuerzo nacional por mantener la estabilidad
macroeconómica y la implementación de políticas de apertura comercial y de
promoción de la inversión privada, lo cual además ha favorecido la
consolidación del Perú como el país con el mejor entorno para el desarrollo de
las microfinanzas y la inclusión financiera, definida ésta por la Comisión
Multisectorial de Inclusión Financiera (CMIF) como “el acceso y uso de
servicios financieros de calidad por parte de todos los segmentos de la
población”.
Asimismo, comprobar que los avances en la promoción
de la inclusión financiera, favorecieron el diseño de la Estrategia Nacional de
Inclusión Financiera, la cual fue oficializada en junio del 2015, y a la fecha
es implementada por los diversos actores involucrados. Los principales retos
para esta estrategia son promover un mayor acceso a los mercados financieros,
incrementando la cobertura geográfica; b) promover el mayor uso de servicios,
mejorando el ecosistema de productos acordes a las necesidades de la población,
facilitando el desarrollo y profundización de los canales de distribución; y aumentar
la confianza y conocimiento de los consumidores para la toma de decisiones
informadas frente a los productos y servicios financieros.
Por otro lado, en los últimos cinco años se ha
incrementado el uso de servicios financieros, superando los seis millones de
personas naturales que tienen crédito a diciembre de 2015. Resultando de ello
que el 31% de la población adulta tiene un crédito.
No hay comentarios:
Publicar un comentario