Escribe César Sánchez Martínez /
LIMA
Un
emprendedor es una persona que trabaja con ahínco, es decir, con eficacia,
diligencia y empeño. Tiene valores y principios innatos, inherentes a su
naturaleza como la transparencia, autoridad, entusiasmo, entrenamiento,
lealtad, empatía y simpatía, virtudes que las aprendió en el camino, aunque a
veces se equivoca y le cuesta dinero y dolor, se levanta y sigue adelante. Sabe
que, en la vida, todo se aprende.