El
Congreso de la República aprobó por mayoría establecer en nuestro sistema
parlamentario la figura del “escaño parlamentario vacío” para sancionar al
congresista que se le compruebe la comisión de un delito contra la salud
pública en la modalidad tráfico ilícito de drogas, terrorismo, trata de
personas o lavado de activos.
El
dictamen, sustentado por el presidente de la Comisión de Constitución y
Reglamento, Cristóbal Llatas Altamirano, propone declarar la vacancia por el
resto del período parlamentario de los congresistas que sean destituidos en el
cargo por sentencia judicial firme vinculada a esos graves delitos, sin que
proceda su reemplazo por el accesitario. Con esa medida, el partido o alianza
de partidos que lo postuló perdería el escaño hasta el término del período
parlamentario.
Con
esa finalidad, el proyecto de resolución legislativa, para cuya aprobación se
necesitaba del voto a favor de la mitad más uno del número legal de
congresistas (66 votos) y no requería de segunda votación, propone incorporar
el artículo 15-A al Reglamento del Congreso, en el que se establece que en ese
caso no se aplicaría lo dispuesto en el artículo 25 sobre reemplazo por el
accesitario.
La
decisión fue tomada con el voto a favor de 72 congresistas, el voto en contra
de otros 17 y la solitaria abstención de Gustavo Rondón.
El
texto original proponía referirse a la propuesta como la figura de la “curul
vacía”, pero a última hora el congresista Javier Velásquez propuso que se
hablara de “escaño parlamentario”, lo que fue aceptado por el titular de la
comisión dictaminadora.
Durante
el amplio debate, conducido por la titular del Parlamento, Ana Solórzano
Flores, el congresista Mauricio Mulder, secundado luego por su compañero de
bancada Javier Velásquez, propuso complementar la propuesta estableciendo en el
segundo párrafo del artículo 16 del Reglamento del Congreso: “que no podrán ser
protegidos por la inmunidad los congresistas con acciones penales iniciadas
antes de su elección”.
Esther
Saavedra planteó que se dispusiera también suspender al legislador que se le
abriese un proceso penal hasta que se dictase sentencia, a favor o en contra de
su persona.
Por
su parte Juan Díaz Dios propuso que se hiciera un añadido para que, en el caso
de Madre de Dios, que tiene solo un representante en el Congreso, no se quedase
sin representación. En tal sentido, sugirió que se hiciese una excepción,
autorizando a ocupar la curul vacía al accesitario de la agrupación política
que ocupe el segundo lugar, de acuerdo con la cifra repartidora.
Daniel
Abugattás advirtió que se debía analizar el caso de los tránsfugas determinar
si se sancionaba con la pérdida del escaño al partido por el cual fue elegido o
de la agrupación de la que formaba parte en el momento de su sentencia.
Para
evitar esos casos, tanto la congresista Rosa Mavila y Luz Salgado propusieron
fortalecer a las agrupaciones políticas, a la vez que destacaron la importancia
de la pronta aprobación del proyecto de ley que propone establecer la “ventanilla
única” para consignar en ella todos los antecedentes policiales, judiciales,
tributarios, etc. de los aspirantes a una candidatura parlamentaria.
Alberto
Beingolea se pronunció en contra de la propuesta por considerar que no iba a
tener ningún resultado positivo, pues si actualmente la bancada oficialista “blinda”
a sus congresistas por faltas menores, según dijo, “peor será cuando se trate
de perder a un congresista y un escaño. El blindaje será mayor”, aseguró.
Finalizado el debate, el titular de la comisión
dictaminadora presentó un texto sustitutorio con la propuesta de incluir
únicamente el artículo 15-A y dejar sin efecto la propuesta de modificación del
artículo 25 del Reglamento del Congreso, lo que fue aprobado sin objeciones.
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